Desde 2002, los vecinos del Barrio Brasil comenzaron a percibir y denunciar un aumento de delincuencia. Según ellos, el aumento del peligro, y de las molestias nocturnas como ruidos estridentes y riñas, era causado por el gran aumento de los locales de entretención en la zona, como bares, restoranes y pubs.
Gran parte del sector de Av. Brasil, la plaza, Cumming y calles perpendiculares se encuentra poblado con una amplia oferta de locales nocturnos. Tanta fue la insistencia y las quejas de los vecinos en la municipalidad, que hasta el año 2008 intentaron que se cancelara la entrega de patentes de alcoholes para la zona, alegando una sobreexplotación de dichos locales en el sector. La municipalidad argumentaba que no pueden negarse las patentes, cuando quien solicita tiene un local que cumple con las condiciones, pero en 2009 no habrían entregado patentes nuevas.
© Equipo Plataforma Patrimonio
Otra polémica, relacionada con la vida nocturna en el barrio, surgió a fines del año pasado, cuando por una riña y disturbios ocasionados en un acto con una clara marca política, se dio orden de clausura al Galpón Víctor Jara. La Fundación apeló a esta orden de clausura, reunió firmas de los vecinos para que se revocara la clausura, y se comprometió a acondicionar el espacio para eventos masivos, puesto que el argumento del alcalde Pablo Zalaquett consistía en que el lugar no contaba con las normas de seguridad adecuadas.
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